Nigel de Jong ya es parte de Los Angeles Galaxy. En los hechos lo es desde hace un puñado de días, pero su presentación oficial no se produjo hasta el martes. En su primer contacto con la prensa especializada el jugador hizo públicas sus primeras sensaciones con respecto a la MLS y también se refirió a su salida del Milan.
«Los últimos seis meses fueron difíciles. Nunca me había pasado antes el hecho de no ser un titular habitual. Siempre fui titular a lo largo de mi carrera», comentó De Jong durante la conferencia de prensa en la que fue presentado como nuevo futbolista del Galaxy. «Era algo entre el técnico y yo. No podía hacer otra cosa más que esperar mi turno. Ahora estoy aquí, y estoy contento de tener una oportunidad en un país que realmente me gusta.»
El internacional holandés explicó que desde niño es fanático del deporte estadounidense, que Charles Barkley -una de las personalidades más fuertes dentro de la NBA en las últimas décadas- fue una inspiración para su carrera profesional, y hasta se definió como aficionado de Pittsburgh Steelers, equipo de la NFL.
Ese conocimiento de la escena norteamericana, la posibilidad de trabajar y vivir en California, y el hecho de sumarse a un grande de la Major League Soccer fueron determinantes para dar el sí a la oferta de la franquicia dirigida por Bruce Arena. «Siempre dije que si tenía la oportunidad de venir a Estados Unidos, lo haría. Afortunadamente esa posibilidad llegó. Era mi primera opción pese a que tenía posibilidades de seguir jugando en Europa.»
Pero el club cinco veces ganador de la MLS Cup no contrató a Nigel de Jong para que disfrute del American way of life, sino para marcar diferencias que vuelvan a poner al cuadro angelino en una situación apta para volver a luchar este año por el título.
El ambiente de la Major League Soccer no está libre de los prejuicios que están presentes en el fútbol internacional. Pero el Destructor no se preocupa por la fama de futbolista violento que ya se ha instalado en la máxima categoría del fútbol de Norteamérica. «Realmente no me interesa lo que diga la gente. Esto no se trata de mantener una reputación, sino de contar con una mentalidad ganadora que hay que mostrar sobre la cancha. Al final del día todo se trata de ganar y de quedarte con tres puntos en el bolsillo.»
Con la incorporación del ex volante central del AC Milan el Galaxy compró poderío físico y liderazgo. Algo que De Jong comenzó a mostrar días atrás en el amistoso ante San Jose Earthquakes disputado en Las Vegas. Un partido que sirvió para que el holandés comience a formarse una opinión sobre la MLS. «El nivel del juego es diferente, es un poco más bajo, pero creo que podemos mejorar como equipo», explicó el futbolista de 31 años.
«Por supuesto, el nivel en Europa es alto, pero eso no significa que uno no quiera ganar. Eso no es ningún problema para mí. Tenemos que salir a la cancha sin preocuparnos por el nivel.» Nigel de Jong considera que la llegada a la liga de futbolistas con destacado pasado en el territorio de la UEFA sin dudas sirve para levantar el nivel de juego de la competición.
Las expectativas que el Galaxy está generando con las contrataciones de De Jong, Ashley Cole y Jelle Van Damme -que llegan a un plantel en el que ya están jugadores como Robbie Keane, Steven Gerrard, Gio dos Santos, Gyasi Zardes y Sebastian Lletget- son considerables en estos días previos al comienzo de la temporada regular.
De manera oficial este nuevo plantel debutará en una semana, cuando Los Angeles reciba en el StubHub Center al equipo mexicano de Santos Laguna, en el encuentro de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones de CONCACAF.
Fotografía: Los Angeles Galaxy