La salida del portugués llega en un momento clave de la pretemporada. «Durante las próximas semanas nos enfocaremos en los drafts, en completar a nuestros planteles y en armar una exitosa pretemporada que pueda preparar a nuestros equipos (Orlando City, Orlando Pride y Orlando City B) para sus campañas en 2016″, señaló Rawlins a través de un comunicado oficial. La vara que se fija el club de la camiseta morada es alta. «Nuestro objetivo para el año próximo no es otro que el de llegar a los playoffs, tanto con los Leones como con el Pride, y pretendemos conseguir esa meta para nuestros aficionados y nuestro club.»

La contratación de Carneiro -exdirector general del Benfica– se produjo en noviembre y generó un impacto de consideración. El portugués, pretendido por varios de los equipos de primer nivel de Europa, optó por continuar su carrera en la Major League Soccer. Poco después del desembarco de Armando Carneiro en Orlando City SC el gerente general del club, Paul McDonough, decidió dejar esa función para ser contratado casi de manera inmediata por el Atlanta United FC, equipo de expansión en la MLS en la temporada 2017. En otras palabras, Orlando se quedó sin la persona que armó el plantel en 2015 y sin quien iba a armar el de la temporada 2016.

La historia de Orlando City SC no comenzó en 2015 con su entrada a la MLS. Los cuatro años previos de estadía del club en la USL Pro generaron una serie de empatías entre funcionarios del club y sus aficionados. La salida de McDonough y de su asistente Ian Fuller (exjugador del equipo) no sentó bien en el núcleo duro de la hinchada morada. Algunos aficionados responsabilizaron de manera personal a Carneiro por ambas bajas. Una situación que tal vez ayude a comprender la súbita salida del portugués de la franquicia.