Por primera vez la federación canadiense reconoció de manera oficial su intención de volver a contar con una liga local de primera división. Durante una entrevista concedida al programa Red Card Radio el presidente Victor Montagliani (en la fotografía) admitió que la Canadian Soccer Association trabaja desde hace dos años en el proyecto de creación de un nuevo modelo competitivo de Division 1.
No se trataría de la creación de un capítulo canadiense de la NASL (apoyado por la inversión de los equipos de la Canadian Football League) del que hablamos hace casi un año. La idea que la CSA tiene en manos se aproxima mucho más al concepto de liga explicado durante el verano por el periodista Duane Rollins, de Canadian Soccer News.
La nueva primera división nacional en el país norteño tendría entre 8 y 10 participantes. Y Montagliani y su cuerpo de colaboradores habrían decidido hacer todo lo posible para contar con equipos en las ciudades de Vancouver, Toronto y Montreal, los tres principales mercados del país del norte, ‘copados’ desde hace año por la presencia de franquicias de la MLS.
Pese a que la competición sería durísima para los equipos que decidieran instalarse en el territorio ya dominado por Whitecaps, TFC e Impact, la federación cree que una nueva liga 100% canadiense no funcionaría sin clubes que representen a los tres polos urbanos más grandes del país.
«Tenemos todo el derecho del mundo de establecer una liga profesional. Normalmente las federaciones no manejan ligas profesionales, pero estamos en esta situación especial, en la que Canadá no cuenta con ninguna liga propia», explicó Montagliani en diálogo con el periodista Anthony Totera, de Red Card Radio.
Pese a que en el fútbol canadiense existe un torneo llamado Canadian Soccer League, no debe esa competición ser confundida con un torneo nacional. La CSL -que se define a sí misma con una especie de tercera división, por debajo de la MLS y la NASL– es una liga de la que solamente participan equipos de la provincia de Ontario y fue expulsada del ámbito de la federación canadiense en 2014, tras reiteradas denuncias de amaños de partidos.
La Canadian Soccer Association pretende ser cuidadosa en el proceso de construcción de este nuevo intento de una primera división nacional. De la mano de esa competición -que, de acuerdo con cálculos optimistas, podría entrar en actividad en dos o tres años- la federación espera poder presentar ante la FIFA su candidatura para ser la organizadora de la Copa del Mundo de 2026.